El enemigo es el Trastorno de Alimentación.
El enemigo es el Trastorno de Alimentación
Cuando eres capaz de separar a tu hij@ del trastorno (del “Bicho”, como lo llamo yo), entiendes que el/ella no ha decidido estar ahí, que está atrapado en la red del trastorno y que ésta le impide VIVIR.
La enfermedad los maneja, los destruye y a nosotros con ellos.
Tienes que tener claro que nadie decide sufrir de esa manera por voluntad propia, que el enemigo es el trastorno de alimentación NO TU HIJ@.